Las mujeres indígenas son las depositarias de los conocimientos de los sistemas alimentarios y las medicinas tradicionales.
Además, son defensoras denodadas de las lenguas y las culturas indígenas.
También defienden el medio ambiente y los derechos humanos de los pueblos indígenas.
Para construir un futuro equitativo y sostenible que no deje a nadie atrás, debemos amplificar las voces de las mujeres indígenas.
Los conocimientos tradicionales indígenas pueden ofrecer soluciones a muchos de nuestros desafíos comunes.
En mi reciente visita a Suriname, aprendí de primera mano cómo los pueblos indígenas están protegiendo su pluviselva y la rica biodiversidad que esta alberga.
En este Día Internacional, exhorto a los Estados Miembros a que apliquen la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y a que promuevan los conocimientos tradicionales indígenas en beneficio de todos.